Existen muchos y muy diversos tipos de metales en el mundo. Cada uno con aplicaciones y modos de trabajo y de obtención muy diferentes entre sí. Esto ha llevado a que se desarrollen múltiples formas de clasificar estos metales. En esta ocasión, nos interesa hablar en particular acerca de los metales alcalinos, qué son y sus aplicaciones.
¿De qué hablamos cuando hablamos de metales alcalinos?
Cuando hablamos de metales alcalinos, estamos haciendo referencia a aquellos elementos químicos del grupo 1 de la tabla periódica. Se compone, este, por los elementos Li, Na, K, Rb, Cs, Fr. En términos generales, a las columnas verticales de la tabla periódica se les suele conocer como grupos. Esto permite generar clasificaciones donde los elementos pasan a formar parte de un mismo grupo con otros metales y elementos con características o propiedades que son similares. Por lo general, los elementos que forman parte de un grupo suelen tener la misma valencia atómica.
Hablando en particular de los metales alcalinos, los que aparecen en la tabla periódica de los elementos son los siguientes:
- Li: litio
- Na: sodio
- K: potasio
- Rb: rubidio
- Cs: cesio
- Fr: francio
En lo que refiere a sus características, podemos decir que son materiales químicamente activos. Son metales blandos, que se suelen encontrar habitualmente en forma de sales. Además, es importante mencionar que son materiales que no existen en la naturaleza de manera libre, por lo que requieren de ciertos procesos específicos para su obtención.
Todos los metales alcalinos se caracterizan en particular por contar con un solo electrón en su nivel más externo. Además, son metales con una marcada tendencia a la pérdida de este electrón. Cuando están en contacto con los no metales, suelen reaccionar de manera fácil. esto último se debe a que son metales que se caracterizan por tener muy poca afinidad electrónica, a la vez que tienen una baja energía de ionización.
¿Cómo se obtienen los metales alcalinos?
Como hemos dicho con anterioridad, estos metales no existen en la naturaleza de manera libre. Son metales que se obtienen por electrólisis de sales fundidas. Un ejemplo común de ello es lo que se conoce como el método de Down. El sodio metálico se obtiene a través de lectrólisis del cloruro de sodio fundido. Ello, en una celda a la que se le da el nombre de “Downs”. Se suelen agregar pequeñas cantidades de cloruro de calcio, que tienen por objetivo reducir el punto de fusión del cloruro. Esto permite un ahorro en el combustible. Por su parte, el litio se obtiene a través de minerales que son aluminosilicatos.
¿Cuáles son los usos de los metales alcalinos?
Finalmente, para conocer los metales alcalinos, es importante hablar de sus usos y aplicaciones. Esto depende de cada metal en particular. Por un lado, el litio se utiliza, en la actualidad, especialmente para la síntesis de aluminio de gran resistencia. Se usa, además, para producir vidrios, como componente de pilas, baterías y lubricantes y para esmaltado de cerámica.
En lo que respecta al potasio, este se usa fundamentalmente para la producción de vidrios, pero también de jabones y de fertilizantes. Además, es vital para la transmisión del impulso nervioso. El cesio es el principal componente en la fabricación de las células fotoeléctricas, mientras que el rubidio se usa para la eliminación de gases en sistemas de vacío.
Finalmente, el sodio se usa mayormente en la industria textil, puesto que tiene potencial blanqueador. Está, además, en ciertos jabones y en algunas gasolinas. También puede estar en lámparas de vapor de sodio y se puede usar para refrigeración en reactores nucleares. Si bien es cierto de que es tóxico para el consumo humano, también es un elemento fundamental de las células.